Y cuando digo Aromaterapia, el arte de despertar los sentidos, es porque para mi, hablar de la Aromaterapia, de un aceite esencial, un hidrolato o un aceite vegetal, es hablar del alma de la planta, de lo más profundo que ésta, puede ofrecernos para mantener, mejorar y equilibrar nuestra Salud. La Aromaterapia es una ciencia antigua y eterna, su uso como terapia, se remonta siglos atrás, a civilizaciones de las cuales, hemos aprendido numerosas técnicas (relacionadas o no con la Salud) y que nos han servido de guía en muchos sentidos, hasta nuestros días, a saber: egipcia, romana, india, árabe, china…
Lo mejor de todo, es que la Aromaterapia, ha perdurado hasta nuestros días, no sin haber pasado por malos momentos como por ejemplo, la Revolución Industrial, periodo en el cual hubo a su vez, una Revolución Científica donde, el desarrollo constante de la ciencia química, implicó aislar un compuesto químico activo de una planta y sintetizarlo para producirlo en masa; así se denostaba el «arte» y las bases de la Aromaterapia que se habían conocido hasta entonces, puesto que se habilitaba la producción barata de grandes cantidades de sustancias sintéticas, las cuales contenían muy pocas de las propiedades terapéuticas del original. Así, los aceites esenciales se desmontaron partícula por partícula, dando lugar a lo que ha llegado hasta nuestros días como copias baratas y sintéticas del verdadero Aceite Esencial, que para que cumpla sus funciones Holísticas (*), debe contener el todo en cuanto a partículas aromáticas que lo definen. Además de para uso cosmético o del hogar, estas copias baratas, resultaron ser muy poderosas, llegando a nuestros días como la base de las drogas modernas (medicamentos incluidos).
(*) indica que un sistema y sus propiedades se analizan como un todo, de una manera global e integrada, ya que desde este punto de vista su funcionamiento sólo se puede comprender de esta manera y no sólo como la simple suma de sus partes. Una definición un poco soporífera, ¿verdad?. En definitiva, es como todo lo relacionado con la medicina integrista que ve al ser humano como un todo y no por partes. Otro gallo nos cantaría si fuese así la medicina moderna, que nos rompe por especialidades sin querer ver el cuerpo como un todo en el cual, cada órgano, cada sistema se nutre de otro
Así que cuidadito con lo que compráis por ahí, porque al final, en vez de Aromaterapia, el arte de despertar los sentidos… tendría que poner como título: Eso que respiras y crees que es Aromaterapia destroza tus sentidos. Cuidado con lo que respiráis en casa y también por supuesto, lo que os colocáis en la piel ya que lamentablemente luego llegan las alergias e irritaciones, puesto que las fragancias y sustancias químicas sintéticas, son las que suelen dar las reacciones de alergias cutáneas y otros problemas de salud más graves.
Por esto que os cuento, luego venís a mi tienda o a cualquier centro en el que se vende Aromaterapia de la de verdad, y os escandalizáis si os decimos que un Aceite Esencial de Sándalo variedad Santalum album, los 5ml rondan los 54€. Recolectar lo que será el órgano productor (raíz, tallo, hoja, cáscara, flor…), en su momento y lugar óptimo, manipularlo, destilarlo de la manera más efectiva y correcta, no es un proceso fácil ni poco costoso. Para que os hagáis una idea, para destilar 1kg de Aceite esencial de Lavanda, se necesitan 150 kg de sumidades floridas de esta planta, qué pasada ¿no? y ya no te digo si lo que quieres es un Kilo de Rosa Damascena la conocida Rosa de Bulgaria, ya puedes preparar entre 3.500/4.000 kilos de pétalos de esta flor y pagar los 195€ que te pueden costar los 5ml de su aceite. Como siempre os digo, no existe pescadilla gorda que pese poco, ¡es así! si verdaderamente quieres cuidar, equilibrar o mejorar tu salud con Aromaterapia, deberás hacerlo con sustancias certificadas y para eso lo mejor es comprarlas en sitos especializados. Aquí meto una cuña de publicidad y así husmeáis y cogéis fuerza para continuar, en este enlace encontraréis verdadera Aromaterapia de calidad.
Un poco de Historia sobre la Aromaterapia…
Escrito en India, cerca de 2000 a.c, uno de los libros más antiguos sobre plantas llamado «Vedas» incluye una lista de más de 700 plantas y sustancias, como el sándalo. el jengibre, la mirra, la canela y el cilantro con propósitos tanto religiosos como medicinales. Procedimientos y rituales en los cuáles se realizaban ungüentos curativos, aceites medicinales, cataplasmas y perfumes curativos.
Son los antiguos Egipcios a quienes se consideran los pioneros en el uso de las plantas aromáticas. No sólo utilizaban óleos aromáticos para inciensos, medicinas, masajes, cuidado de la piel y cosméticos, sino también en sus procesos extremadamente refinados de preservación de los muertos. Las fuertes propiedades antisépticas y antibacterianas de los aceites, se utilizaban en el embalsamamiento de los muertos y ayudaba a prevenir el pudrimiento de la carne con la intención de preservar las momias por 3000 años ya que se creía, que este era el tiempo que le llevaba a un alma pasar por todos los animales de la tierra para luego volver a ser, un ser humano.
Los antiguos egipcios, eran expertos en el uso de resinas y esencias de plantas en el proceso de embalsamado y para perfumar los templos. De hecho, cuando en 1922 Howard Carter y su equipo abrieron la tumba de Tutankamón se descubrieron jarros y potes que todavía contenían ungüentos aromáticos de incienso, nardo hindú y kyphi (ver debajo) – que habían estado sellados por más de esos 3.000 años.
Uno de los perfumes favoritos de los egipcios (que después fue usado también por griegos y romanos), era el llamado «kyphi» y tenía más usos que simplemente un perfume ya que podía aplicarse como antiséptico, incienso, antídoto, bálsamo y de acuerdo con Plutarco, también como tranquilizante que «llevaba a la persona a dormir, calmar ansiedades e iluminar sueños«. El kyphi contenía una mezcla de 23 ingredientes diferentes que incluían cálamo (un poderoso narcótico, de ahí supongo que viene lo de «iluminar sueños»), casia, canela, menta, citronela, pistacia, junípero, acacia, alheña, cyperus «resina», madera de cedro, incienso, mirra y pasas. El kyphi era tan intrínseco a la sociedad egipcia que en la Heliópolis (la ciudad de Sol), el dios del sol Ra era venerado a través de la quema de incienso tres veces al día: se quemaba una «resina» al amanecer, mirra al mediodía y kyphi al atardecer.
La higiene personal era muy importante para los egipcios y el Papiro de Ebers de 1500 a.C. contiene uno de los primeros registros de recetas para un desodorante corporal en ser descubierto. ¡Mira que es antiguo esto de usar desodorante y algún Homo Sapiens Sapiens a día de hoy, todavía no lo conoce!, no sé que opinarían los egipcios de esto.
Esto ha demostrado que los médicos egipcios tenían un conocimiento exhaustivo de las propiedades de un gran número de hierbas. El uso de perfume, era de especial importancia para los egipcios y estaba asociado a la religión. De echo, era tan importante, que cada dios egipcio, tenía asignada una fragancia particular que era utilizada frecuentemente para ungir sus estatuas. Algunas recetas y fórmulas para mejorar la salud, también han sobrevivido grabadas en tablas de piedra. Uno de los métodos favoritos para aplicar perfume era colocar un cono de ungüento sólido sobre la cabeza que se derretiría lentamente con el calor y cubriría la cabeza y el cuerpo con la mezcla aromática. Hoy en día esta técnica es muy preciada en los masajes ayúrvedas, por ejemplo…
No hay registros que muestren que el proceso de destilación había sido inventado en ese momento, entonces los únicos métodos de producción de aceites aromáticos disponibles para los egipcios habrían sido el «enfreulage» y la «maceración». El enfreulage consistía en empapar la planta en aceite y luego toda la mezcla retorcerla en una tela bien apretada hasta obtener la fragancia, mientras que la maceración consistía en calentar el material aromático en aceite. Esta técnica si habéis leído el libro o visto la película «El Perfume» os sonará.
Como os he dicho, diferentes civilizaciones, han contribuido a que a día de hoy, podamos disfrutar de esta técnica tan antigua como eficaz a la horade preservar y mejorar la salud desde nuestras vías olfativas, pero también desde nuestra piel. A día de hoy, podemos ver infinidad de referencias a estudios que se han hecho a nivel médico, dando importancia al uso de la Aromaterapia para mejorar la salud en enfermos con cáncer, personal sanitario y su estrés… Como a Google le gusta mucho lo de los enlaces salientes, aquí os dejo uno sobre el uso de la Aromaterapia en la medicina moderna, pinchad aquí e iréis al PubMed que es un motor de búsqueda donde podéis consultar contenidos de la base de datos Medline. Pero luego volved!!
Aunque lo único que me queda por deciros en este post. es que nos vemos en su (parte 2) en la que hablaremos de la Aromaterapia en nuestros días, enfocada a la vida moderna y os daremos alguna «receta» con la cual podréis mejorar pequeños baches diarios en cuanto a salud se refiere. ¿Nos vemos?